Patrimonio Mundial
El 2 de noviembre de 1984 el Palau Güell fue declarado Patrimonio Mundial por la UNESCO. Esta declaración representó un reconocimiento formal a su valor universal excepcional y a su carácter único como obra maestra de la creatividad humana.
La inscripción del Palau Güell en la Lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO fue acompañada de la inscripción de otras obras de Antoni Gaudí: el Park Güell y la Casa Milà (en 1984), y la Casa Batlló, la cripta de la Colonia Güell, la fachada de la Natividad y la cripta de la Sagrada Familia y la Casa Vicens (en 2005).
La inscripción conjunta en la Lista, bajo el epígrafe de «Obras de Antoni Gaudí», se basó en los tres siguientes criterios:
Criterio (i): La obra de Antoni Gaudí representa una contribución creativa excepcional y remarcable al desarrollo de la arquitectura y de la construcción de finales del siglo xix y principios del siglo XX.
Criterio (ii): El trabajo de Gaudí representa un importante intercambio de valores, estrechamente asociados a las corrientes culturales y artísticas de su tiempo, representadas por el modernismo catalán. Anticipó e influyó en un buen número de formas y técnicas que fueron relevantes para el desarrollo de la construcción moderna del siglo XX.
Criterio (iv): La obra de Gaudí representa una serie de ejemplos extraordinarios de la tipología de construcción de la arquitectura de principios del siglo XX, tanto residencial como pública, a cuyo desarrollo Gaudí contribuyó de una forma significativa y creativa.